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¿Ha descubierto una plancha oxidada que necesita más atención de la que pensaba? Que no cunda el pánico. En BonFeu, estamos aquí para ayudarle a recuperar su plancha. La plancha puede oxidarse si no la ha utilizado durante mucho tiempo o si el mantenimiento no es el adecuado. Afortunadamente, puede hacer frente al óxido y conseguir que su plancha vuelva a brillar con unos sencillos pasos.

1. Eliminar el óxido grueso

Empiece por eliminar los puntos de óxido grueso. Utilice una espátula resistente para raspar suavemente sobre los puntos oxidados. Este paso es importante porque te ayudará a eliminar los trozos y acumulaciones de óxido más grandes, haciendo que la superficie quede más lisa y te permita seguir trabajando mejor.

2. Use sal gruesa y vinagre húmedo

Espolvorea sal gorda y vinagre de sosa sobre la plancha y déjala actuar un rato; esto actúa como abrasivo. La sal y el vinagre aflojan el óxido y facilitan su eliminación.

3. Utilice un cepillo de acero

Tras un breve tiempo de remojo de la sal y el vinagre, puedes utilizar un cepillo de alambre para fregar el óxido. Ten cuidado al utilizar un cepillo de acero: acero sobre acero puede provocar arañazos. Por tanto, intenta cepillar en la dirección de la veta del acero para minimizar el riesgo de arañazos.

4. Evitar abrasivos y productos químicos

Es tentador utilizar detergentes fuertes, pero esto puede hacer más mal que bien. El jabón verde, por ejemplo, es ligeramente abrasivo y puede dañar el revestimiento antiadherente, permitiendo que los alimentos se peguen a la plancha. Los detergentes como Dreft pueden dejar residuos que pueden causar olores o sabores desagradables cuando se calientan, e incluso pueden ser perjudiciales para los alimentos. Lo mejor es utilizar agua caliente para limpiar la plancha. Se puede secar con un paño o papel de cocina.

5. Engrasar la plancha

Tras la limpieza, es hora de lubricar la plancha. Este es un paso crucial para evitar que se oxide en el futuro. Aplique una fina capa de aceite vegetal a la superficie de la plancha y extiéndala uniformemente con un paño. Asegúrese de cubrir toda la plancha con aceite para crear una capa protectora.

6. Calefacción

Para que el aceite se absorba bien y se desprenda el óxido que pueda haber quedado, es conveniente volver a calentar la plancha. Caliente la plancha a una temperatura moderada. Esto ayudará a que el aceite penetre en la superficie y mejore el estado general de la plancha.

7. Mantenimiento regular

Más vale prevenir que curar Un mantenimiento regular puede evitar la oxidación en el futuro. Limpie la plancha después de cada uso y vuelva a aplicar una fina capa de aceite. Esto prolongará la vida de la plancha y la mantendrá en perfectas condiciones.

Si quieres ver estos pasos de forma visual, mira este vídeo.

Siguiendo estos pasos, puede restaurar su plancha a un estado excelente y garantizar su longevidad. ¿Aún tiene preguntas o necesita más consejos? No dude en ponerse en contacto con nosotros. Estaremos encantados de ayudarle a poner su plancha a punto para que pueda volver a disfrutar plenamente de sus aventuras culinarias.

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